EL GPS, la historia de su creación

RODRIGO Ariza / Editor general

Las indicaciones y señales para llegar a determinado sitio quedaron en el recuerdo, ahora la tecnología ha desplazado las costumbres que desde nuestros antepasados veníamos utilizando.

El tiempo para ir de un lado a otro y poder saber cuántos minutos u horas deberíamos invertir, antes de la utilización del reloj, se media el tiempo de diversas maneras; algunos se basaban en la puesta del sol, otros grababan en su mente el paisaje y determinaban el tiempo, pero en el campo los campesinos iban de un lugar a otro entre la maleza y para “espantar” insectos y reptiles que pudieran hacerles daño, ellos encendían un cigarro, chicote o tabaco y emprendían el camino. Había viajes largos en los que durante el trayecto se fumaban dos o tres cigarros, es ahí cuando los campesinos decían que determinado sitio estaba a dos cigarros y medio o más o a veces menos. Otras personas median la distancia y el tiempo entre dos o más lugares, basados en los tragos de algún líquido que llevaran, los campesinos colombianos solían llevar una bebida autóctona que se llama guarapo o chicha, que echaban en unos recipientes hechos con el fruto del árbol de totumo.

Lo anterior se realizó hasta que apareció la genialidad de la dama estadounidense Gladys West, la creadora del sistema llamado GPS (Global Positioning System, o sistema de posicionamiento global).

Hoy ir de un lado a otro es fácil y seguro, basta tener un celular con datos y la aplicación GPS descargada. Para navegación y mapas, GPS es la aplicación más utilizada y más instalada en línea en todo el mundo; la aplicación de navegación GPS para el teléfono Android es impulsada por Google Maps. Para utilizar esta aplicación de navegación y mapas GPS, se debe instalar en línea, así que existe la necesidad de una conexión a Internet al navegar.

Tener esta valiosa herramienta, es posible gracias a Gladys West, matemática estadounidense que contribuyó a modelizar la esfera terrestre y a desarrollar los modelos satelitales que después se utilizaron para la creación del GPS.

-Para muchos de nosotros, dar instrucciones a un ser querido sobre cómo llegar a un sitio es algo ya desacostumbrado. En vez de eso mencionamos la dirección para que él o ella lo introduzca en su móvil y una aplicación de mapas le indica el camino. Antes de eso, de los móviles, dispositivos específicos se encargaban de esta tarea, instalados a menudo en el panel de control del tablero del coche-.

Gladys West nació en 1930 en Virginia, Estados Unidos, y por ser negra vivió desde pequeña los efectos de la segregación racial y la discriminación. Nació en el seno de una familia de granjeros, en su infancia trabajó en los terrenos de la granja familiar, sin embargo, desde pequeña supo que no quería trabajar toda su vida recogiendo tabaco y decidió que la educación sería su forma de buscar una vida diferente para sí misma.

Comenzó su educación en la Escuela Roja, como se conocía al colegio de primaria al que asistió, que se encontraba a unos cinco kilómetros de distancia y que ella debía recorrer a pie. Todos los niños y niñas que asistían allí, recibían las lecciones en la misma aula y entre todos, Gladys West se destacó.

 
Gladys West tuvo que vencer muchas dificultades y vicisitudes para alcanzar su objetivo de asistir a la universidad, ella después de haber alcanzado el umbral de la edificación, ingresó sabiendo que allí se marcaria la historia de su vida y sin proponérselo, marcó el destino de la humanidad.

Lo que escogió, era lo que dominaba desde niña, las Matemáticas, sin reparar que ésta era un área muy respetada y al tiempo ejercida en su mayoría por hombres, “En mi corazón sabía que nada se iba a interponer en mi camino”. Se graduó y comenzó a trabajar como profesora, ahorrando para continuar sus estudios.

De regreso a la universidad años después, obtuvo el título de máster en matemáticas.

Continuó ejerciendo la docencia, pero pronto encontró trabajo en la base naval de Dahlgren, en Virginia. En ese momento fue la segunda mujer contratada como programadora en esa base en toda su historia, y una de los únicos cuatro trabajadores negros de toda la base.

En la base naval de Dahlgren, Gladys conoció a quien un tiempo después se convirtiera en su esposo: Ira West.

Comenzando la década de los 60, Gladys West participó en un trabajo que resultó muy premiado y que demostró la regularidad del movimiento de Plutón respecto a Neptuno. Y por sus conocimientos y desempeño, se convirtió en la jefe del proyecto que desarrollaría parte del equipo del Seasat, el primer satélite desarrollado para monitorizar los océanos, y como tal dirigió un equipo de cinco personas. En esta experiencia, Gladys West se encargó de programar un IBM 7030, un ordenador significativamente más rápido que otros equipos del momento. Esto permitía obtener cálculos precisos para desarrollar un modelo de la esfera terrestre, que luego fue una de las piezas sobre las que se construyó el GPS.

Gladys West nunca imaginó que, sus estudios y desarrollos ayudarían a crear tecnología que después todo el mundo llevaría en sus coches o bolsillos, cambiando la manera de orientarnos y la precisión para llegar de un lugar a otro en el mundo. “Nunca se me ocurrió que lo que estaba desarrollando como tecnología militar terminará siendo tan emocionante. No pensé que pudiera terminar transfiriendo a la vida civil una tecnología militar avanzada, fue una agradable sorpresa” enfatizó en su momento Gladys West.

Lo que nadie puede imaginar es que, Gladys West prefiere un mapa o pedir indicaciones para llegar a un sitio, que utilizar un dispositivo GPS, “Me gusta hacer las cosas con las manos. Si veo la carretera, y veo dónde gira y a dónde va, me siento más segura” agregó.

Hoy 100% Noticias ha querido resaltar el trabajo de una mujer valiente, decidida, visionaria y ejemplar, Gladys West: La Creadora Del GPS…